Fotos by Cucho

Texto by Juan Carlos

EL RASO DE VILLALPANDO



Viernes 23 de abril de 2004




Hay mañanas en las que uno no se encuentra para nada


Especialmente si tiene que madrugar, sortear charcos, arena, barro...


... y coger el coche (casi uno por barba) para irse hasta Cañizo con la burra.


Lo bueno es que, nada más salir, nos encontramos con una sucursal del Duero


Y un cangrejo al que alguno le había pegado un bocado.


Por supuesto, paramos a cerciorarnos de que era un cangrejo y no un invasor galáctico


Y poco después nos encaminamos al monte objetivo


Ver conejos era difícil pero lo hicimos (¿o eran liebres?)


Y con sorpresa descubrimos que las alambres no les dejaban pasar


Luego, la típica paradita de rigor (la primera, claro)


Si es que ganas no había muchas


Pero teníamos que seguir, a ver si no cómo cogíamos el coche


Tan pronto pelotón groupé


Como pelotón desagrupé


O medio agrupé


Este ya se olía la que le esperaba, pero no era plan de amargarse la salida


No, no es un cordón de zapatos. Son huevos, y dos sapos haciendo los deberes


Al fin llegamos al monte.


¿Os imagináis desde dónde está sacada esta foto?


¿Y esta?


Pista: Parecía fácil subir hasta allí arriba


Pero sólo pudieron dos arrojados valientes


Aquí el segundo de los héroes, Alberto, que se encaramó a lo más alto de un torreón sujeto por unos cuantos cables y tres vigas metálicas, y que a decir de los que lo aborearon temblaba más que una vara verde




Aquí nuestro fotógrafo en una de las raras instantáneas en que aparece


Y distintas vistas de la torre metálica, par que luego digan de la Torre Eiffel












Bueno, y al final, volvimos a casita, que teníamos morro para comer y cenar.